Conéctate con nosotros

ANÁLISIS Y OPINIÓN

Patricia Bullrich y su «curiosa» mirada sobre las indemnizaciones

Por Amado Brancatti, columnista de Mundo Gremial

Publicado

|

Días pasados, la referente del ala dura de Cambiemos, la siempre ubicua Patricia Bullrich, tuvo declaraciones llamativas sobre lo que piensa acerca de las indemnizaciones laborales.

Sin rodeos, afirmó que “la actual indemnización es un robo” y que además no eran “razonables”. Llama la atención semejante juicio de valor sobre un derecho que comporta una protección para los trabajadores despedidos sin justa causa.

Pero más llamativo todavía resulta lo que argumentó para defender su postura: “un persona que trabaja tres meses, en vez de cobrar un mes por año como corresponde en la ley de indemnizaciones, se les ponen multas (a las empleadores), se les ponen intereses y terminan fundiendo empresas”.

Y decimos que llama la atención dado que damos por supuesto que una política que fuera ministra de trabajo debiera tener más amplios conocimientos sobre la legislación laboral, en este caso en relación a los despidos e indemnizaciones.

Veamos: por empezar, no es cierto que a una persona que trabaja tres meses le corresponda indemnización alguna en caso de ser despedida, ya que esos tres meses entran dentro de lo que es el período de prueba. Es decir que solo luego de los tres meses, según la normativa vigente, el empleador “deberá abonar al trabajador una indemnización equivalente a UN (1) mes de sueldo por cada año de servicio o fracción mayor de TRES (3) meses”.

Tampoco es cierto que la ley sancione con multas a los empleadores que despidan trabajadores, cosa que ocurre solo en el caso lógico de trabajo no registrado, puesto que esta situación constituye un delito de evasión.

Con relación a los intereses, como bien aclaró el senador Mariano Recalde, uno de los tantos que salió a cruzar por las redes a Patricia Bullrich, debe tenerse en cuenta los años que duran en Argentina los juicios laborales, por lo que “toda deuda genera el correspondiente pago de intereses, no solo los créditos laborales”.

Teniendo en cuenta los pedidos casi constantes de reforma laboral por parte de Bullrich y del espacio del que forma parte, como por sus relaciones con lo más duro del sector libertario, tal vez sus declaraciones no deberían ser tomadas al pasar.

En el contexto de un debate de agendas en año electoral, es evidente que declaraciones tan cargadas de valoración como de ignorancia tienen un objetivo político: señalar hacia dónde apuntan las reformas que propone y buscar potenciales socios que la acompañen.

En ese sentido, sus declaraciones son una buena señal: dejan a las claras que los cambiemitas van por la erradicación de los derechos laborales conquistados por los trabajadores. El movimiento obrero debería tomar nota de ello.