La falta de acuerdo paritario, pone en terapia intensiva a la salud privada

Tras declararse en estado de alerta y movilización por no llegar a un acuerdo de actualización salarial para el sector asistencial, desde la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA) dejaron entrever el impacto que tiene el escenario en la región capital.

El secretario general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA) de La Plata y secretario de Finanzas de FATSA, Pedro Borgini, le confió a Mundo Gremial que la situación «es bastante compleja».

En la región capital afecta «todo lo que son clínicas; sanatorios; geriátricos; psiquiátricos; consultorios; y centros de imágenes y emergencias; es decir, es bastante grande la cantidad de compañeras y compañeros que se ven afectados», apuntó el también senador bonaerense de Unión por la Patria.

Recordemos que la Federación se encuentra con problemas para poder cerrar el acuerdo paritario de abril y mayo en todo el sector asistencial. «Eso nos está haciendo retrasar en el aumento para todos los trabajadores de la actividad», marcó Borgini.

No obstante, agregó: «También tenemos atrasadas las homologaciones en el sector de la industria farmacéutica tanto laboratorios como droguerías. Mientras nos invade la preocupación, los empresarios se niegan a dar el aumento que corresponde para abril y para mayo», denunció.

Las palabras del referente sindical refuerzan lo que días atrás comentó Mundo Gremial cuando alertó que la entidad que conduce Héctor Daer, a nivel nacional, señaló que «la inflación y la devaluación espectacular realizada en diciembre han dinamitado el poder de compra de los salarios».

Bajo es escenario, subrayaron que «los aumentos conseguidos en los meses de febrero y marzo, «fueron sepultados por los aumentos de precios, tarifas y servicios públicos de los últimos meses».

Con un misil teledirigido a los empresarios, la Federación advirtió que no aceptaría salarios «cuyo poder de compra se encuentra absolutamente deteriorado», y exigió una «justa recomposición salarial que merecemos y ganamos con nuestro trabajo».

Viendo la negativa de las Cámaras Empresariales para firmar un acuerdo paritario, la entidad adelantó que desplegará asambleas informáticas a fin de empapar en la situación a los y las trabajadoras del sector.